Un humilde blog

miércoles, octubre 07, 2009

Arrugas de madera

La tempestad se desató por la noche pero no se produjo nada extraordinario

Un beso a medias,
una sonrisa entera..

Y pequeñas arrugas de la vida
que se marcaron en tu camino.








¡No tengo tiempo ni para pensar!

1 comentario:

Jaime Olmedo dijo...

es que trabajas muchi! de vez en cuando saca algo de tiempo para deleitarnos con tus ¿mini-relatos?